¿El récord mundial de velocidad es argentino?

En 1979 se registró en la Patagonia Argentina, caracterizada por sus fuertes vientos, una velocidad promedio en concurso colombófilo que hasta el día de hoy no pudo ser superada en el país.

Fue un ejemplar macho anillo 570463/78 de plumaje mínimo perteneciente al palomar de Antonino Cutropia, por entonces radicado en Comodoro Rivadavia, el que en la competencia desde Camarones, a 154 Km. de distancia de Comodoro, desarrolló una velocidad promedio de 189,712 Km./h. ¡Es decir, recorrió el tramo en apenas 49 minutos!

Con posterioridad, si bien se han registrado velocidades interesantes en Argentina, ninguna pudo superar aquella proeza patagónica de hace 42 años. Este es el Ranking Histórico que hemos conformado:

1979 – Camarones – 154 Km. – Comodoro Rivadavia – Paloma 570463/78 – Antonino Cutropia – 189 Km./h.

1991 – Chajarí – Vicente López – José Cafiero – 173 Km./h.

1992 – Zapala – 653 Km. – Puan – Paloma 721926 – Pedro Krieger – 165 Km./h.

1991 – Florencia – San Antonio de Areco – Paloma 591397/88 – Horacio Fernández – 152 Km./h.

1991 – Concordia – 358 Km. – Capital Federal – Paloma 863738/90 – Jorge Pini – 144 Km./h.

No hemos encontrado con facilidad antecedentes similares en otros países que nos permitan señalar que hay tiempos de marca a mayor velocidad. En el caso de Estados Unidos, la American Union lleva un registro desde 1976, en el que se reseña la mejor performance en el año 2004 por una paloma de Bobby Brown de Wichita Falls, cuando una de sus palomas en un concurso de 102 millas (164 Km.) voló a 2957 yardas, lo que equivale a 162,240 Km./h. (Fuente: https://www.pigeon.org/pdf/AUSpeedRecords.pdf). Al menos por encima de la mayor velocidad estadounidense se ubica la paloma de Argentina. En el mismo documento de la AU, se habla de distancias máximas de competencias, entre las que llamativamente surge una carrera de 3281 Km. en 1937, en la que el ejemplar vencedor demoró 43 días en arribar a su palomar. Esto nos da pie a hablar de concursos de Super Gran Fondo que han tenido lugar hasta el presente en el país, pero será motivo de otra nota. Por ahora disfrutamos junto a los visitantes del sitio la aparentemente insuperable velocidad de la paloma del recordado «Nino» Cutropia.